Gabriel González Arriagada / Quilpúe 2022
Es lo nuevo del señor Albarn, el hombre tras Blur, uno de los pocos músicos que siempre nos recuerda que se encuentra en constante movimiento sonoro.
Everyday Robots, es un disco que desde su portada nos traslada hacia un cuarto a baja luz y nos permite disfrutar de lo que podríamos llamar el relieve de la música. Cada uno de los 12 temas que componen el disco, se encuentran perfectamente ubicados y entrelazados de manera tal que la escucha no pierde continuidad dentro de nuestra cabeza.
Inaugura los fuegos “Everyday Robots”, pieza perfecta para comenzar el recorrido ya que anuncia la versatilidad del disco, “Hostiles” y “Lonely Press Play” aparecen como anfitrionas de una atmósfera sumida en la melancolía, pero que a su vez deja en descubierto los muchos pliegues en su musicalización, la que no deja de ser sencilla. Cuando pensábamos que la tónica del disco conservaría este toque, Damon golpea con “Mr Tembo”, canción que por muy pegote y comercial que parezca es instrumentalmente interesante, con aires étnicos a la vista y con Albarn cantándole a un Elefante que conoció personalmente.
“Parakeet” es un puente de sonidos agradables que preparara los sentidospara afrontar “The Selfish Giant”, pieza que representa quizás el momento más complejo del disco, con un piano que se deja oír como si tuviese el control total del set list, un tema que luce por completo la textura del disco, lo mismo ocurre con “You and Me”, tema que nos vuelve a introducir en el cuarto inicial con todo el concentrado de sonidos.
“Hollow Pounds” es de esas conexiones que, sin ser una grandiosidad, es generosa en dejar en evidencia la calidad vocal que mantiene el inglés, la que acompaña con precisión los tiempos del tema, “Seven High” es otro enganche que nos pide estar atentos al cierre del disco para dar paso a “Photographs” que juega con la profundidad inicial del disco elevándonos poco a poco a un punto en donde amaga dejarnos caer y nos vuelve a meter en órbita.
“The History of a Cheating Heart” aporta la serenidad logrando un ambiente similar a “It ́s Hard To Get Around The Wind” de Alex Turner en su disco para la rara película “Submarine”.
El cierre del álbum es en grande, “Heavy Seas Of Love” nos saca del cuarto en el que estamos y nos mete en una catedral con coro góspel más Brian Eno incluidos, esto para ejecutar un juego de voces notable que nos deja en la cúspide, no sin antes hacer más notorio el contraste de instrumentos.
Everyday Robots es un trabajo que demuestra la madurez creativa de un tipo que no para, no es una obra maestra, pero si se empeña, por su toque de intimidad sonora, su relieve y porque a ratos recuerda que desde los tiempos del In Rainbows de Radiohead que no disfrutábamos de un disco con tanta variedad musical.